La doctora y profesora titular de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Córdoba, Inmaculada Benavente, expuso dentro del curso que sobre "Cultura empresarial: Nuevos modelos de gestión y administración de empresas" se viene desarrollando en Fons Mellaria 2006, las técnicas para dotar de flexibilidad el tiempo de trabajo e hizo un estudio de la que tienen algunos tipos de contratos por razón de su jornada; tales como el realizado a tiempo parcial y el contrato fijo discontinuo. En esta línea, Benavente explicó que "el empresario puede utilizar esta clase de contratos para lograr una mayor flexibilidad en la organización de la empresa y gestión del tiempo de trabajo dentro de la jornada laboral".

Al respecto, la profesora también dejó claro que los destinatarios voluntarios de estos contratos son "las personas que acceden por primera vez al mercado de trabajo, personas cercanas a la jubilación, estudiantes que desean compaginar el trabajo y los estudios, mujeres con niños pequeños, o personas que quieren alternar su trabajo con otra actividad". No obstante, Benavente reconoció que "lo que ocurre es que estos destinatarios voluntarios de los contratos a tiempo parcial sólo son realmente voluntarios cuando hay un mercado de trabajo sano; porque cuando hay un mercado de trabajo insano y con mucho desempleo, el trabajador tiene que conformarse con el tipo de contrato que le ofrece el empresario, incurriendo en ocasiones en situaciones de fraude y encubriendo con el contrato parcial una contratación a tiempo completo". "Con lo que se da una gran diferencia entre la teoría ideal y la realidad", puntualizó la profesora Benavente.

Por último, la doctora en Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Córdoba hizo hincapié en que "el ordenamiento jurídico da muchas oportunidades y herramientas al empresario con estos contratos para la utilización lícita del tiempo de trabajo de una forma flexible, adaptando las necesidades de la empresa y ajustando los costes del trabajo a lo que requiere el empresario y los contratos son lo suficientemente flexibles como para que no sea necesario cometer fraude", concluyó.